Feromonas

En primer lugar debes saber que la palabra feromona se deriva de la palabra griega pheran (transferir) y horman (excitar).

"El término feromona puede definirse como una sustancia excretada por los individuos de una especie, que promueve el atractivo con el sexo opuesto de esa misma especie". Winnifred B. Cutler
Las feromonas humanas son secretadas naturalmente por el organismo de las personas en edad fértil e influencian las relaciones entre las mujeres y los hombres.
Aumentan la atención romántica y la receptividad sexual. Para seducir y conquistar al sexo opuesto.
Las feromonas son emitidas por hombres y mujeres, y son mensajeras aéreas que despiertan conductas sexuales en los demás. Se ha comprobado que tienen efecto en el 75% de las personas que las utilizan.
La influencia de las feromonas emitidas por el sexo opuesto en el despertar del deseo sexual se relaciona definitivamente con sustancias químicas invisibles e inodoras.
Las Feromonas son afrodisíacos que potencian tu vida sexual y la de tu pareja.
El concentrado de feromonas vale para varios objetivos: potenciar la vida sexual, mejorar las relaciones laborales o sociales, superar la timidez y apoyar actitudes personales de conquista sexual o liderazgo social.
Aunque aparentemente no tienen olor, provocan reacciones en el otro a través del olfato, y las reacciones son completamente inconscientes.

En 1986 la Dra. Winnifred B. Cutler, reconocida científica , bióloga y endocrinóloga de la conducta , co-descubridora de las feromonas humanas, comprobó su existencia en los humanos y comenzó a documentar sus efectos, como lo demuestra su estudio avalado por la Universidad Estatal de San Francisco, en los Estados Unidos.
Diversos estudios de la Universidad de Stanford, han probado que las mujeres que mantenían relaciones sexuales con más frecuencia tienen ciclos menstruales más regulares-y mas saludables- y que estos ciclos se armonizan mediante la emisión de una feromona; la Dra. Cutler se propuso demostrar que esa sustancia que despiden las hembras tiene como objetivo hacerlas sexualmente más atractivas para el sexo opuesto. Las feromonas se producen en las glándulas urinarias, senos, boca y axilas en una gran variedad de especies animales, incluyendo a los humanos.
Las feromonas no pueden percibirse simplemente mediante del olfato, sino a través de tejidos altamente especializados, el Epitelio Olfatorio y el Órgano Vomeronasal, estructuras olfatorias especializadas que se encuentran en el interior de la cavidad nasal y se conectan con el hipotálamo, una parte del cerebro que se encarga de controlar las funciones reproductivas y las emociones, como el miedo, la alegría y el deseo sexual.
Este órgano permite responder a los olores sexuales. En los humanos, las feromonas son un sello personal y no siempre se perciben fácilmente, ya que se combinan con otras sustancias generadas por la piel de los individuos, conformando una mezcla única y personal, originando el olor característico de una persona.